Comprar un piso en Palma se ha convertido en una odisea, y si además deseas que tenga piscina, la aventura se vuelve casi épica. ¿Sabías que tener acceso a una pileta puede costarte más de 200.000 euros? Sí, así lo indica un informe reciente del portal inmobiliario Idealista, que revela que el sobrecoste para disfrutar de este lujo asciende nada menos que a un 55%.
Pongamos las cosas en perspectiva: actualmente, el precio medio del metro cuadrado en la capital balear es de 4.772 euros. Esto significa que un piso estándar de 80 metros cuadrados te saldría por unos 381.760 euros. Pero espera, porque añadir esa ansiada piscina dispara el total hasta los 591.734 euros. Para muchos, estas cifras son simplemente inalcanzables.
La dura realidad del mercado inmobiliario español
No solo Palma enfrenta estos elevados precios; a nivel nacional, comprar un hogar con piscina implica desembolsar un 91% más comparado con uno sin ella. La situación es aún más alarmante en Barcelona, donde el diferencial llega a ser de un asombroso 163%. Otras ciudades como Teruel (147%), Lleida (118%) y Ceuta (112%) siguen esta tendencia preocupante.
Aunque no todo está perdido: según los datos de Idealista, el 23% de los pisos vendidos en Palma cuentan con piscina; cifra inferior al promedio nacional del 34%. Alicante lidera la lista con un impresionante 37%, seguido por Málaga (31%). ¿Quién diría que disfrutar del sol y el agua podría ser tan complicado?
Sigue siendo vital estar informado sobre estos temas si queremos hacer frente al desorbitado mercado inmobiliario. Es momento de reflexionar sobre hacia dónde nos dirigimos y qué significa realmente vivir cómodamente aquí.