Este miércoles, mientras recorría Son Sardina, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, dejó claro que no está por la labor de entrar en discusiones vacías. ¿El motivo? Una posible moción de Vox para prohibir celebraciones islámicas en espacios públicos. En su discurso, Martínez mostró una postura firme al afirmar que no tiene intención de sumarse a este tipo de controversias sin sentido.
Construyendo puentes en lugar de muros
A la pregunta de los periodistas sobre cómo votaría si llegara esta iniciativa a su mesa, fue tajante: «No sé qué moción presentaría Vox y por tanto no puedo contestar». Pero lo que sí dejó claro es que su enfoque como alcalde se basa en construir y tender puentes, no en levantar muros. Para ello, ha creado un área dedicada a la Interculturalidad dentro de su gobierno.
Martínez también subrayó la importancia de normalizar las creencias y el día a día de todos los ciudadanos de Palma. “Creemos en la cohesión social y territorial”, comentó con convicción. Y es que, en nuestra ciudad, la comunidad musulmana celebra el Eid Al-Adha o Día del Cordero en un evento multitudinario en el polideportivo Germans Escalas. Ahora queda ver cómo se posicionará el PP respecto a esta propuesta polémica de Vox presentada ya en el Parlament.