La batalla por un Paseo Marítimo más ordenado y respetuoso está en plena marcha. La Policía Local, de la mano con la Autoritat Portuària de Balears (APB), no se están quedando de brazos cruzados. En su última ronda de inspecciones, levantaron cinco actas a locales que pasaron por alto las normas, ¡y uno de ellos ya era reincidente! El Ayuntamiento ha hecho un llamado este viernes para poner a todos en alerta.
Una lucha constante por el espacio público
Desde finales de mayo hasta principios de junio, los agentes han estado en plena acción, con una quincena de actas emitidas por infracciones graves que afectan a 14 locales. ¿El motivo? La mayoría han sido pillados ocupando la vía pública sin permiso y otros dos no retiraron sus mesas y sillas después del cierre. Como bien recuerdan desde el Ayuntamiento, ocupar el espacio público sin autorización es una infracción grave que puede costar entre 750 y 1.500 euros.
No solo eso; quienes insisten en saltarse las reglas pueden enfrentarse a sanciones aún más severas: hasta 3.000 euros. Y si alguien cree que va a seguir haciendo lo que le plazca, debe saber que tras la segunda infracción, esto se convierte en algo muy grave. Además, el Ayuntamiento tiene la potestad para cerrar temporalmente esos locales durante tres meses.
Afortunadamente, no están solos en esta lucha. La Asociación de Vecinos del Paseo Marítimo lleva años pidiendo un cumplimiento estricto de las ordenanzas municipales y valora positivamente esta colaboración entre Cort y la APB. “Estas acciones deben mantenerse en el tiempo para lograr un verdadero cambio”, afirman con esperanza.