El aire en Palma está cargado de frustración y, con cada atasco, se siente que algo no marcha bien. Los representantes de Més, encabezados por el conseller Jaume Alzamora y el concejal Miquel Àngel Contreras, están decididos a ponerle fin a este caos. En el próximo pleno del Ayuntamiento, presentarán una propuesta que busca limitar la circulación de vehículos en el corazón de nuestra ciudad, un primer paso hacia la solución de este «colapso viario» que ya muchos señalan como responsabilidad del PP.
Nuevas medidas para respirar mejor en Palma
Además de abogar por una tasa reguladora, Més hace un guiño a las iniciativas que ya funcionan en Formentera. La idea es clara: tenemos que actuar antes de que todo se convierta en un embotellamiento permanente. Según explicó Contreras, quieren que el Ayuntamiento reconozca oficialmente esta crisis y tome cartas en el asunto.
Pensando en soluciones prácticas, han propuesto una prueba piloto con ‘zonas de tránsito inteligente’. ¿Te imaginas? Sensores capaces de detectar los atascos al instante y regular automáticamente semáforos y señales. Una maravilla tecnológica al servicio de todos nosotros.
No solo eso; también exigen mejoras en los autobuses interurbanos (TIB), especialmente para aquellas zonas donde vive más gente que trabaja a diario en Palma. Como dijo Contreras: «Ayer, un simple incidente paralizó toda la red viaria; una persona tardó más de una hora desde Marratxí hasta su trabajo». Y eso no es justo para nadie.
Més va más allá y pide crear nuevos carriles bici, construir aparcamientos disuasorios conectados con autobuses lanzadera e incluso diseñar una app municipal para promover el coche compartido. Todo lo necesario para hacer frente a un problema creciente.
La crítica al PP no se ha hecho esperar: «Se presentaron prometiendo acabar con los atascos y hoy estamos peor», sentenció el concejal. Desde el Consell, Alzamora reforzó esa visión afirmando que hasta ahora solo han visto medidas que fomentan el uso del coche privado.
En resumen, Més rechaza decisiones como eliminar el carril Bus-VAO o ampliar carreteras, defendiendo la idea de que es momento de asumir responsabilidades sobre transporte terrestre y dar prioridad a alternativas sostenibles. Después de todo, si hay 122.000 coches sobrantes en Mallorca según estudios recientes, parece claro que necesitamos cambiar nuestra forma de movernos por la isla.