MADRID 16 Dic. (EUROPA PRESS) – Este martes, el Kremlin ha dejado claro que no tiene intención de aceptar una tregua por Navidad en el conflicto de Ucrania. ¿La razón? Según ellos, sería como dar un respiro a la otra parte. Todo esto surge tras la petición del canciller alemán, Friedrich Merz, quien había instado a poner fin a los combates durante las festividades.
«Queremos la paz, no una tregua que les permita prepararse para seguir luchando», ha afirmado con rotundidad Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin. Sus palabras son un eco de lo que han venido diciendo: Rusia quiere detener este conflicto y asegurar sus intereses en Europa.
Una postura firme y bien conocida
Peskov insistió en que la posición rusa es coherente y “bien conocida” tanto por Ucrania como por Estados Unidos. En este sentido, no están dispuestos a ceder ante «decisiones inviables a corto plazo». Así responden al llamamiento de Merz hacia Putin mientras las delegaciones ucraniana y estadounidense se encuentran en Berlín intentando negociar el plan de paz propuesto por Donald Trump.

