En un mundo donde la tensión geopolítica parece estar siempre al borde de estallar, el presidente francés Emmanuel Macron ha tomado cartas en el asunto. Este jueves, anunció que enviará tres cazas ‘Rafale’ para reforzar la protección del espacio aéreo polaco, después de que una veintena de drones rusos hicieran su incursión en la frontera, encendiendo las alarmas no solo en Polonia sino en toda Europa.
«Después de los incidentes con los drones rusos, he decidido movilizar estos cazas para ayudar a nuestros aliados y proteger el flanco oriental», aseguró Macron a través de su cuenta en X. Es evidente que la situación está muy tensa; los polacos ya derribaron varios drones el miércoles con apoyo aéreo de otros miembros de la OTAN. Este es un episodio significativo, pues marca el primer choque directo desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania hace más de un año.
La respuesta internacional ante la amenaza rusa
El presidente francés también se ha puesto en contacto con Mark Rutte, secretario general de la OTAN, y Keir Starmer, primer ministro británico, para coordinar esfuerzos en esta crucial misión. «La seguridad europea es nuestra prioridad número uno. No podemos permitirnos ceder ante las amenazas cada vez más audaces de Rusia», sentenció.
Aunque el Ministerio ruso asegura que sus ataques no tenían como objetivo Polonia y que los drones no cruzaron intencionadamente esa frontera, lo cierto es que esta situación nos recuerda lo frágil que puede ser la paz en nuestro continente. Como ciudadanos europeos, debemos preguntarnos hasta dónde estamos dispuestos a llegar para garantizar nuestra seguridad y cómo responderemos ante estas provocaciones internacionales.

