MADRID, 7 de septiembre. En una contundente respuesta, el gobernador de Illinois, Jay Robert Pritzker, no se ha guardado nada al referirse al presidente estadounidense, a quien ha calificado de «dictador». ¿La razón? La amenaza lanzada por Trump de desplegar la Guardia Nacional en Chicago con el fin de acelerar la detención y deportación de migrantes sin documentación.
Pritzker, con palabras firmes y un claro tono desafiante, ha señalado en sus redes sociales: «El presidente amenaza con ir a la guerra contra una ciudad americana. Esto no es una broma. No es normal. Donald Trump no es un hombre fuerte; es un hombre asustado». Estas declaraciones llegan tras las provocadoras afirmaciones del mandatario, que aseguró que Chicago estaba «a punto de descubrir por qué (el Pentágono) se llama Departamento de Guerra», rematando con su habitual sarcasmo: «Me encanta el olor a deportación por la mañana».
Un clima tenso que preocupa
Pero esto no queda ahí. Trump ha reiterado su intención de llevar a cabo este despliegue en Chicago y ha denunciado lo que él llama «rampante delincuencia» en varias ciudades como Baltimore y Maryland, localidades que también podrían estar en su punto de mira. Recordemos que durante su discurso inaugural el 20 de enero, prometió frenar la entrada ilegal de inmigrantes y acelerar la deportación de millones. Esta semana firmó un decreto que renombra al Departamento de Defensa como Departamento de Guerra, asegurando que esto refleja «la situación actual del mundo».