En un giro inesperado, el primer ministro británico, Keir Starmer, ha decidido hacer limpieza en su gabinete. Este viernes, tras la sorpresiva dimisión de la vice primera ministra, Angela Rayner, por unos problemas fiscales relacionados con la compra de una vivienda, Starmer no se lo ha pensado dos veces y ha reconfigurado todo. La noticia ha dejado a más de uno con la boca abierta.
Ahora, quien ocupará el lugar de Rayner es David Lammy, hasta ahora ministro de Exteriores y que a partir de hoy también llevará las riendas del Ministerio de Justicia. ¡Menudo cambio! En el área diplomática entra Yvette Cooper, que venía liderando Interior, mientras que Shabana Mahmood, antes al frente de Justicia, tomará las riendas del Interior.
Nuevos rostros en un gobierno en movimiento
Pero eso no es todo: también hemos visto marcharse a Lucy Powell, líder de los Comunes, quien será reemplazada por Alan Campbell. Y si pensabas que las sorpresas acababan aquí, te cuento que el ministro para Asuntos de Escocia, Ian Murray, también se va decepcionado por quedar fuera del Ejecutivo; su puesto lo tomará Ian Douglas Alexander.
Acompañando a esta oleada de cambios llegan nuevos nombres al gabinete: entre ellos están el nuevo ministro de Vivienda, Steve Reed; el encargado del Trabajo, Pat McFadden; y el titular del Comercio, Peter Kyle. Además, tenemos a la nueva ministra de Ciencia y Tecnología,
Liz Kendall, y por último pero no menos importante,
la ministra del Medioambiente,
Emma Reynolds. Sin duda alguna, estos movimientos muestran que Starmer está decidido a dar un golpe sobre la mesa y redefinir su estrategia hacia adelante.