MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) – El conocido opositor israelí Yair Lapid ha vuelto a alzar la voz en medio del caos que envuelve a la Franja de Gaza. Este domingo, lanzó un mensaje contundente y directo: Israel no puede permitirse llevar a cabo una guerra si la mayoría de su población no está detrás. Con más de 60.400 palestinos muertos, sus palabras resuenan con fuerza.
Lapid argumentó que siempre ha existido un requisito fundamental para emprender guerras en Israel: el respaldo mayoritario del pueblo. “No se puede avanzar a ciegas”, subrayó desde su cuenta en la red social X. “Los ciudadanos tienen que creer en los objetivos y confiar en sus líderes”, algo que, según él, ya no sucede. En este contexto tan crítico, hizo un llamado apremiante: “Es hora de poner fin a esta guerra y traer de vuelta a los rehenes”.
Un gobierno desquiciado
Aprovechando el tirón mediático, Lapid no se detuvo ahí. Criticó ferozmente lo que él considera un “gobierno desquiciado”, moralmente defectuoso y completamente opaco. Para él, la prioridad del Ejecutivo actual es proteger al primer ministro y su familia por encima del bienestar de los rehenes y sus seres queridos. “La agenda no ha cambiado”, sentenció con desdén.
Las palabras de Lapid reflejan el descontento creciente entre muchos israelíes que ven cómo el conflicto se intensifica sin un rumbo claro ni una verdadera estrategia que contemple las necesidades humanas básicas.