Desde La Haya, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha lanzado un mensaje claro y contundente sobre la necesidad de aumentar la inversión en defensa en Europa. En la antesala de la cumbre de líderes de la OTAN, subrayó que el umbral del 5% del PIB es «el nivel correcto» para garantizar una respuesta efectiva ante las amenazas actuales. Pero hay más: reclama que al menos un 0,25% se destine exclusivamente a ayudar a Ucrania.
Un grito por la paz y la seguridad
Zelenski no se anda con rodeos. Según él, esta inversión es crucial para «parar a Putin ahora y en Ucrania», alertando sobre posibles nuevas ofensivas rusas que podrían afectar incluso a países de la OTAN. En su intervención durante un foro industrial al margen de la cumbre, hizo hincapié en que Putin ha rechazado todas las propuestas de paz hasta el momento; parece que su supervivencia política está ligada a seguir con su agenda bélica. «Cuanto más mata, más vive», resumió Zelenski, reflejando una desesperante realidad.
A pesar de no ser parte de la OTAN, Zelenski sigue buscando apoyo entre los líderes europeos. Se reunió con figuras clave como Mark Rutte y Ursula von der Leyen para discutir cómo seguir respaldando a Ucrania ante esta amenaza inminente. El presidente del Consejo Europeo también expresó su frustración por el aumento de agresiones rusas mientras se busca un alto el fuego.
En cada palabra de Zelenski resuena una llamada urgente: cada componente que termina en las manos del armamento ruso prolonga este conflicto y representa una amenaza real para nuestra seguridad colectiva. Espera que el potencial defensivo sirva para construir paz y no para alimentar las locuras bélicas que nos acechan.