El 17 de junio, desde Madrid, nos llega la noticia de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han desatado una nueva ola de ataques sobre Irán. Este martes, el Ejército ha confirmado que se han dirigido a diversos objetivos estratégicos, apuntando especialmente a lanzaderas de misiles. Y no se detendrán aquí; su Fuerza Aérea tiene claro que va a seguir operando en los cielos iraníes con el único propósito de localizar y destruir cualquier equipo que amenace su seguridad.
Un conflicto que no cesa
Las imágenes difundidas por el Ministerio de Defensa muestran al titular del departamento, Israel Katz, reunido con altos mandos de la Fuerza Aérea para dar luz verde a esta ofensiva. “No hay Fuerza Aérea en el mundo capaz de hacer lo que estáis haciendo vosotros en los cielos de Irán”, enfatizó Katz con orgullo. Esta situación se agrava tras una serie de ataques lanzados el pasado viernes contra instalaciones nucleares y zonas residenciales en Teherán, donde las autoridades iraníes reportan cerca de 225 muertos.
A la par, Irán no se queda quieto y ha respondido con cientos de misiles y drones hacia Israel, provocando también pérdidas humanas en territorio israelí; al menos 24 personas han perdido la vida según informes oficiales. La escalada es palpable y nos hace preguntarnos: ¿hasta dónde llegará este ciclo violento? Las tensiones aumentan y nosotros seguimos atentos a cada movimiento.