En un giro inesperado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha comenzado a hablar sobre posibles cambios en sus políticas migratorias. ¿La razón? Las quejas de grandes empresarios y agricultores que afirman que sus medidas están dejando al sector sin la mano de obra necesaria. Este jueves, Trump utilizó su red social, Truth Social, para dejar claro que muchos trabajadores cualificados están siendo desplazados por una política demasiado dura.
«Nuestros agricultores y quienes trabajan en el sector hotelero han estado diciendo que esta política agresiva les está robando a excelentes trabajadores, con experiencia valiosa y difícilmente reemplazables», expresó Trump. Y aunque suene contradictorio, también hizo hincapié en que algunos de los que llegan a Estados Unidos son «delincuentes» debido a lo que él llama la «absurda política de fronteras abiertas» del gobierno anterior.
Las consecuencias empiezan a ser evidentes
Así, este es un momento clave. Es la primera vez que Trump reconoce públicamente las repercusiones negativas de sus decisiones para sectores tan dependientes como la agricultura y el turismo. Mientras tanto, todos nos quedamos esperando más detalles sobre qué cambios se avecinan. Lo cierto es que hay mucha gente preocupada por el futuro laboral en estos ámbitos.