MADRID, 30 de mayo. En una rueda de prensa que no dejó a nadie indiferente, Elon Musk, el magnate sudafricano conocido por su audacia y controversias, se ha enfrentado a un torrente de preguntas sobre un reciente artículo del The New York Times. Este informe lo acusa de haber consumido diversas sustancias durante la campaña electoral de Donald Trump. Ante esta situación, Musk optó por el silencio, pero no sin antes lanzar una pregunta mordaz: «¿Es el ‘New York Times’ la misma publicación que ganó un premio Pulitzer por informaciones falsas sobre el Russiagate?» Aplausos en la sala.
En medio del revuelo, Musk reafirmó su lealtad al presidente, asegurando que seguirá siendo un “amigo y asesor” del inquilino de la Casa Blanca. «Si hay algo que el presidente quiera que haga, estoy a su servicio», subrayó con determinación. También destacó el trabajo del equipo detrás del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), diciendo que están haciendo un “trabajo increíble”. Pero ojo, no todo es color de rosa; prometió recortes en gastos gubernamentales que alcanzan hasta un billón de dólares. Una promesa ambiciosa que muchos ya cuestionan.
Las palabras del presidente y las críticas a Musk
Trump también tomó la palabra para defender a Musk, diciendo que ha tenido que trabajar “contra viento y marea”. «Es una pena porque es un patriota increíble», dijo mientras lanzaba elogios hacia él. El expresidente asegura que gran parte del país reconoce y valora lo que ha hecho. Sin embargo, no todos comparten este entusiasmo; algunos ven sus decisiones como caprichosas.
Musk anunció hace poco su salida formal como “empleado especial” del gobierno estadounidense justo después de expresar su decepción con los planes fiscales propuestos por Trump. Un movimiento arriesgado para alguien cuya influencia parece no tener límites.