MADRID, 29 de mayo. La Alta Representante de la Unión Europea para Política Exterior y Seguridad Común, Kaja Kallas, no ha podido contener su indignación. Este miércoles, tras los terribles ataques del 7 de octubre, calificó la ofensiva del Ejército israelí como «intolerable». En un mundo donde la ayuda humanitaria debería ser sagrada, Kallas exigió que esta no se convierta en una herramienta política o militarizada. No podemos seguir viendo cómo se desmantelan vidas y comunidades.
Los ecos de la tragedia en Gaza
Kallas enfatizó que el uso desproporcionado de fuerza y las muertes de civiles son simplemente inaceptables. “Es hora de poner fin a estos ataques”, afirmó con firmeza mientras pedía que se reactiven los altos el fuego rotos desde marzo tras un acuerdo con Hamás. Las cifras son desgarradoras: hasta ahora, 221 periodistas han perdido la vida en este conflicto.
Por si fuera poco, Oxfam Intermón ha denunciado cómo el Gobierno israelí parece decidido a llevar a cabo una estrategia de «desplazamientos masivos», dejando a los civiles atrapados en zonas selladas y rodeadas por fuerzas militares. ¡Es una locura!
Las calles también han estallado en Tel Aviv. Este miércoles, durante protestas contra Benjamin Netanyahu, más de 60 personas fueron detenidas y dos policías resultaron heridos cuando los manifestantes tomaron por asalto la sede del partido Likud.
En un giro impactante, Netanyahu anunció ante el Parlamento que Mohamed Sinwar, el actual líder de Hamás en Gaza, había sido asesinado por las fuerzas armadas israelíes. Todo esto sucede mientras miles claman por paz y justicia entre tanto sufrimiento.