En un escenario donde las declaraciones vuelan y la tensión se siente, el vicecanciller y ministro de Finanzas alemán, Lars Klingbeil, ha salido al paso este lunes para aclarar que no existe ningún acuerdo nuevo en el Gobierno de coalición sobre el envío de armas a Ucrania. Todo esto ocurre justo después de que el canciller, Friedrich Merz, anunciara una retirada sorprendente de las restricciones hasta ahora vigentes respecto a la utilización del armamento alemán por parte de las fuerzas ucranianas.
«Sobre el alcance, quiero ser claro: no hay ningún acuerdo nuevo que supere lo que estableció el gobierno anterior», dijo Klingbeil, según recoge la cadena alemana N-TV. Horas antes, Merz había comunicado que «ya no hay límites en cuanto al alcance para las armas enviadas a Ucrania, ni por parte del Reino Unido, Francia o nosotros. Tampoco por los estadounidenses». Esta declaración ha provocado una fuerte reacción desde Moscú, que considera esta decisión como un paso «bastante peligroso» y en contra de los esfuerzos por encontrar una solución política al conflicto en Ucrania.
Risas y tensiones entre potencias
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, expresó su preocupación diciendo: «Si se toma esa decisión, iría en contra de nuestras intenciones para lograr un acuerdo político». Mientras tanto, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zajarova, decidió añadir un toque irónico a la situación. Comparó el cruce verbal entre Merz y Klingbeil con unas imágenes del presidente francés Emmanuel Macron, donde parece recibir una bofetada juguetona por parte de su esposa. «Espero que estos dos no se estén peleando como los Macron», bromeó Zajarova haciendo referencia al video viral.