En un acto que resuena con fuerza, cerca de 80 Estados miembros de la ONU se han unido para exigir, sin ambages, la protección de los civiles en medio de conflictos armados. Esta demanda surge en un momento crítico, donde miles de palestinos en Gaza enfrentan una crisis humanitaria devastadora, sumidos en el hambre debido a un bloqueo que ya lleva once semanas.
El comunicado, respaldado por países como España, Francia, Italia y China, señala claramente: «Esto no puede continuar». La llamada es urgente. Al final del día, proteger a los civiles no debería ser solo una opción; es una obligación legal y un imperativo moral que todos debemos asumir. En este mensaje conjunto, se insta a todas las partes involucradas a respetar el Derecho Internacional y se invita a los Estados miembros a ejercer su influencia para garantizarlo.
Un grito por la humanidad
Los firmantes del documento muestran su compromiso con el respeto del Derecho Humanitario y lamentan que este año la población civil continúe viviendo condiciones inimaginables. La ONU ha reportado más de 36.000 muertes de civiles en solo 14 conflictos durante 2024; algo completamente inaceptable. El uso indiscriminado de armas explosivas en zonas pobladas ha dejado decenas de miles de víctimas.
A medida que observamos la situación en Gaza, queda claro que estamos ante la peor crisis humanitaria desde el inicio del conflicto israelí. La amenaza de inanición está presente y muchos trabajadores humanitarios han pagado el precio más alto por intentar ayudar. Pero no solo Gaza sufre; también Sudán enfrenta una violencia desgarradora con millones desplazados y niveles alarmantes de inseguridad alimentaria.
Este clamor global no puede quedar en el olvido. A medida que seguimos oyendo historias desgarradoras desde lugares como República Democrática del Congo o Siria, recordemos que cada cifra representa vidas humanas llenas de sueños y esperanzas truncadas.