El pasado miércoles, la situación en Yenín se tornó caótica cuando las fuerzas israelíes abrieron fuego contra una delegación de más de 30 diplomáticos que estaban allí en una misión oficial. La Autoridad Palestina no tardó en reaccionar, acusando a Israel de cometer un «atroz crimen» al disparar deliberadamente contra quienes venían a observar y entender la realidad del lugar.
Un hecho alarmante que no debe pasar desapercibido
En un comunicado del Ministerio de Exteriores palestino, se destacó lo grave de esta acción: «Esto es una violación flagrante del Derecho Internacional», afirmaron. Según la Convención de Viena, los diplomáticos merecen plena protección e inmunidad, y lo que ocurrió en Yenín va directamente en contra de esos principios fundamentales. Este tipo de abusos sistemáticos dejan ver la impunidad con la que actúa Israel, algo que no podemos ignorar.
A medida que el conflicto continúa, la Autoridad Palestina ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que tome cartas en el asunto. En palabras directas: esperan que los países cuyos diplomáticos fueron afectados adopten una postura clara y decidida frente a esta situación tan preocupante.