El pasado viernes, en un tribunal de Nueva York, se hizo justicia. Hadi Matar, el hombre que intentó asesinar al escritor británico Salman Rushdie en agosto de 2022, recibió una condena de 25 años de cárcel. Este acto brutal dejó a Rushdie con graves secuelas: perdió la visión en un ojo y sufrió daños irreparables en su hígado, además de parálisis en una mano. Una tragedia que no debería haber ocurrido.
Un ataque inimaginable
Aquel día fatídico, Matar no solo atacó a Rushdie; lanzó un golpe contra la libertad de expresión y la creatividad. La comunidad literaria quedó conmocionada y todos nos preguntamos: ¿hasta dónde llega la intolerancia? Este joven de 27 años fue hallado culpable de intento de asesinato y asalto, pero eso no resta el dolor que ha causado.
Rushdie sigue adelante con valentía, enfrentando las consecuencias físicas y emocionales de un ataque que nunca debió suceder. En momentos así, es cuando debemos unirnos para defender lo que consideramos fundamental: el derecho a pensar y expresarnos libremente.