MADRID, 13 de mayo. En una declaración que ha levantado más de una ceja, el presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró este martes que entre 50.000 y 60.000 personas se enlistan ‘voluntariamente’ cada mes para combatir en Ucrania. Estas cifras llegan como un intento de contrarrestar las críticas hacia las autoridades ucranianas, quienes, según él, están reclutando a sus ciudadanos ‘como si fuesen perros’. Mientras en Ucrania se habla de movilización forzosa y cacerías humanas para llenar las filas del ejército, Putin insiste en que Rusia tiene un flujo constante de jóvenes dispuestos a unirse a la causa.
Un discurso polémico
En una reunión empresarial donde fue esta declaración, Putin quiso dejar claro que no necesitan recurrir a movilizaciones masivas como las que llevaron a llamar a filas a 300.000 personas el pasado septiembre. Sin embargo, es difícil ignorar cómo en los últimos años han aumentado las tropas rusas con mercenarios o presos buscando alguna clase de beneficio por su participación en el conflicto.
Aunque el Kremlin asegura tener todo bajo control y evita ofrecer cifras concretas sobre bajas desde el inicio de la invasión en febrero de 2022, fuentes ucranianas sitúan los muertos y heridos en las fuerzas rusas alrededor de unas impresionantes 950.000 bajas. Así va la guerra: mientras unos reclutan por la fuerza, otros hacen gala de un voluntariado que parece más propaganda que realidad.