En un giro inesperado de los acontecimientos, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha mostrado su gratitud a Corea del Norte por el envío de tropas al frente, participando activamente en la contraofensiva que se desarrolla en la región de Kursk. Este episodio cobra especial relevancia tras las tensiones que se desataron en agosto de 2024, cuando las fuerzas ucranianas intentaron incursionar en territorio ruso.
El mandatario no escatimó elogios y destacó que el Ejército ruso había logrado, el pasado 26 de abril, una victoria significativa al “completar la derrota” de un grupo de milicianos ucranianos. En sus palabras, esto marca el fin de lo que él llama “provocación criminal” por parte del gobierno ucraniano.
Solidaridad entre naciones
Parece ser que las unidades del Ejército Popular de Corea, como se conoce oficialmente a las fuerzas norcoreanas, jugaron un papel crucial en esta batalla. Según Putin, esta colaboración no solo se realizó conforme al Derecho Internacional, sino también como una muestra palpable de “solidaridad y camaradería”. La dedicatoria fue clara: “Agradecemos sinceramente al camarada Kim Jong Un y a todo el pueblo norcoreano”, afirmó con orgullo.
No dejó pasar la oportunidad para rendir homenaje al valor y sacrificio demostrado por los soldados coreanos. “Defendieron nuestra patria como si fuera suya”, resaltó Putin, enfatizando que su heroísmo quedará grabado en la memoria colectiva rusa. “Nunca olvidaremos lo que hicieron por nosotros; honramos a aquellos héroes”, subrayó con profunda emoción.
A medida que las tensiones continúan marcando el pulso entre estas naciones y Ucrania, Corea del Norte ha reafirmado su compromiso con Rusia. En un comunicado oficial emitido por KCNA se menciona que sus tropas actuaron dentro del marco legal internacional y promete apoyo incondicional hacia Rusia. El mensaje es claro: Pyongyang está listo para seguir respaldando “la sagrada causa del Ejército ruso”. Mientras tanto, observamos cómo estas relaciones forjadas en tiempos difíciles parecen evolucionar hacia un futuro lleno de desafíos compartidos.