En un contexto marcado por la incertidumbre, el Gobierno en funciones de Portugal ha decidido dar un paso al frente. Este 23 de abril, han hecho oficial su intención de solicitar a la Comisión Europea una exención a las normas fiscales actuales. ¿El motivo? Aumentar el gasto en defensa, algo que parece estar en la mente de muchos países dentro de la UE y la OTAN.
A lo largo del mes pasado, Bruselas ya instó a los países miembros a activar esta cláusula nacional de escape. Todo esto surge ante la grave amenaza que representa la invasión rusa en Ucrania, que nos hace replantear nuestras prioridades. Por ello, el Ministerio de Finanzas portugués ha confirmado que buscan alcanzar ese anhelado 1,5% del PIB para defensa sin verse limitados por el tope del 3% en déficit.
Pacto entre partidos para avanzar
Lo interesante es que esta petición no llega sola; ha sido “consensuada” con el principal partido opositor, el Partido Socialista. Esto refleja una voluntad conjunta de priorizar la seguridad nacional en estos tiempos inciertos. Pero ahora queda en manos de Bruselas evaluar estas solicitudes y decidir rápidamente si les dan luz verde.
El procedimiento es claro: el Consejo podría adoptar recomendaciones en un plazo máximo de cuatro semanas. Así que estaremos atentos a cómo se desarrollan los acontecimientos porque está claro que Portugal está decidido a no dejarse arrastrar por las antiguas reglas fiscales cuando se trata de proteger a su gente.