Este domingo, las autoridades libanesas han dado un paso importante al confirmar la detención de varios sospechosos relacionados con el reciente lanzamiento de proyectiles hacia Israel desde el sur del país. Este incidente, que ocurrió el pasado viernes, llevó al Ejército israelí a responder con un ataque inédito utilizando drones en Beirut, marcando un hito desde el acuerdo de alto el fuego alcanzado en noviembre de 2024.
Investigaciones en marcha
La Dirección General de Seguridad Pública ha hecho hincapié en que se están llevando a cabo investigaciones para esclarecer lo sucedido y tomar las acciones legales pertinentes. Tras los cohetes lanzados los días 22 y 28 de marzo, se intensificaron las operaciones de inteligencia para dar con los responsables. En este sentido, el comandante del Ejército libanés, general Rudolph Haykal, anunció que se habían llevado a cabo varias detenciones por orden del primer ministro Nawaf Salam.
A pesar de estas acciones, Hezbolá ha negado cualquier vinculación con el ataque y reafirmó su compromiso con el alto el fuego pactado. Sin embargo, su líder parlamentario, Mohamed Raad, hizo un llamado al Estado libanés para que actúe y ponga fin a lo que consideran agresiones e invasiones. Esto ocurre después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) bombardearan un edificio en Beirut, alegando que era parte de una infraestructura utilizada por Hezbolá.
Aunque ambos lados acordaron retirar sus fuerzas del sur del Líbano, la situación sigue tensa; Israel no ha retirado completamente sus tropas y continúa realizando bombardeos bajo la justificación de actuar contra actividades del grupo chií. Tanto Beirut como Hezbolá han mostrado su descontento ante estas acciones militares.