Este verano, el artista madrileño Kike Meana ha decidido instalarse en la Costa Brava, y no lo hace solo para disfrutar del sol. Está trabajando en un ambicioso proyecto: un cuadro monumental dedicado a la dana, esa devastadora tormenta que dejó huella en Valencia. Su intención es que esta obra, titulada ‘La DANA’, se convierta en un verdadero homenaje a las víctimas de aquella catástrofe.
Un recuerdo que debe perdurar
Kike quiere que su pintura sea más que un simple lienzo; aspira a transformarla en el Guernica valenciano. “Quiero que esté en un sitio público de mucho tránsito”, afirma con pasión, deseando que todos los valencianos puedan recordar lo ocurrido. La pieza, con unas dimensiones descomunales –ocho metros de ancho por casi dos y medio de alto– será donada a la ciudad cuando se cumpla un año de aquel fatídico episodio.
El artista ya está inmerso en el trabajo desde su espacio en el Castillo de Benedormiens, donde también expone una serie de obras bajo el título ‘Humano y Urbano’. Este sábado marca el inicio de una experiencia única, donde los visitantes podrán ver cómo cobra vida su nueva creación. “Estoy aquí para relacionarme con la gente y contarles lo que hago”, dice Meana mientras observa el lienzo aún parcialmente vacío.
A medida que avanza en su obra, Kike incorpora elementos simbólicos como mujeres con pañuelos al estilo Sorolla o incluso un ninot embarrado de fallas, todo ello como representación del dolor sufrido por muchas familias. Y no se detiene ahí; planea incluir 230 personajes para rendir homenaje a las vidas afectadas. “Es un tributo a la solidaridad del pueblo valenciano”, subraya.
Aunque promete dejar fuera a los políticos –“esto es un cuadro despolitizado”– sí habrá soldados voluntarios armados con escobas, simbolizando la unidad ante la adversidad. Al finalizar su estancia en la Costa Brava, Kike regresará a su taller para darle los últimos toques antes de presentarlo oficialmente.
En cada trazo refleja no solo tristeza sino también esperanza y humanidad, creando así una obra colectiva donde cada figura cuenta una historia. Un viaje artístico hacia la memoria que pretende mantener viva la llama del recuerdo.