En Montuïri, un equipo de arqueólogos ha vivido una experiencia que podría cambiar nuestra comprensión de la historia romana en Mallorca. La campaña arqueológica reciente no solo ha superado las expectativas, sino que ha dejado a todos los involucrados con una sensación palpable de esperanza. El lugar, conocido como Son Fornés, podría albergar lo que alguna vez se pensó como un sueño lejano: la tercera ciudad romana de la isla.
Un descubrimiento monumental
El arqueólogo Vicenç Lull no puede ocultar su emoción al hablar sobre los impresionantes muros y las casas monumentales que han comenzado a desvelarse. “Esto no es un simple poblado; esto es una auténtica ciudad”, afirma con pasión. La posibilidad de encontrar Tucis o Guium, dos municipios mencionados por Plinio el Viejo y que nunca se habían localizado, está más cerca de lo que pensamos. “No sería descabellado pensar que están escondidos bajo estas estructuras”, asegura.
Acompañados por un grupo entusiasta de voluntarios y expertos, han trabajado incansablemente para limpiar alrededor de 5.000 metros cuadrados llenos de vegetación. Aunque aún queda un tercio por explorar, ya vislumbran una planificación urbanística romana impresionante y revelan cómo vivían aquellos habitantes hace siglos.
La excavación también ha traído consigo tesoros inesperados: monedas romanas y materiales de calidad excepcional que dan vida a historias antiguas. Con el uso de drones para realizar ortofotos del asentamiento imperial, el equipo se siente más motivado que nunca pero sabe que necesitan un empuje económico adicional para continuar su labor.
A medida que avanzan en este fascinante viaje hacia el pasado, no solo buscan respuestas sobre Tucis o Guium; también están desenterrando parte fundamental de nuestra identidad histórica en Mallorca. Y eso es algo por lo que vale la pena luchar.