Ya es un hecho: los ganadores del VIII Concurso Literario de IDÒ han sido anunciados, y la emoción está en el aire. Este año, los participantes han tenido que incluir palabras como «granera», «indiot» o «somiatruites» en sus microrelatos, lo que ha llevado a una creatividad desbordante. En este certamen, cada palabra cuenta y nos transporta a mundos únicos.
Las historias que nos tocan el corazón
Los dos relatos premiados reflejan no solo talento, sino también la realidad de muchos de nosotros. La ganadora de la categoría A (Infantil y juvenil), Júlia Alorda, con su relato titulado El record, nos lleva a un viaje emocional donde recuerda esos días oscuros encerrada en su apartamento, con la presión del tiempo acechando. ¿Quién no se ha sentido así alguna vez? Con un toque conmovedor y un homenaje a su hermano Ferran, su historia resuena profundamente entre los lectores.
No menos impactante es la obra de Nuredduna Barceló, quien se hizo con el premio en la categoría B (Adultos) con su relato Habitació 476. Aquí, las palabras del médico que parece tener respuestas para todo crean una atmósfera cargada de emociones encontradas. Desde la angustia hasta la esperanza, cada frase es como un rayo de luz atravesando las sombras del dolor.
Agradecemos sinceramente a todos los participantes por compartir sus voces y animamos a seguir adelante; siempre hay espacio para nuevas historias que contar en futuras ediciones del concurso. Así que ¡no perdamos el hilo! La literatura siempre tiene algo nuevo que ofrecer.