En el fascinante mundo de la música, hay obras que trascienden el tiempo y nos envuelven en emociones profundas. Hablemos de Bach, un genio que, según los primeros biógrafos, compuso cinco pasiones, una forma musical muy característica del luteranismo. Pero de esas cinco, solo La Pasión Según San Juan (BWV 245) y La Pasión Según San Mateo (BWV 244) han llegado a nuestros días intactas y sin dudas, escritas por su mano maestra.
Una historia contada a través de la música
¿Y qué significa eso de BWV? Es simple: son las iniciales de Bach Werke Verzeichnis, un catálogo elaborado por el musicólogo alemán Wolfgang Schmieder en el siglo XX. Pero ojo, no se trata de un índice cronológico; cada número no indica cuándo fue creada la obra, sino que agrupa las composiciones temáticamente.
Aquí es donde comienza nuestra historia. En Leipzig, durante la época de Bach, había dos iglesias que competían entre sí: San Tomás y San Nicolás. Imagina la escena: si un año se celebraba una gran fiesta en una iglesia, al siguiente le tocaba a la otra. Así fue como el Viernes Santo de 1724 cayó en 7 de abril y tocó que la pasión musical se interpretara en San Nicolás. Aquella tarde mágica, Bach estrenó su obra La Pasión Según San Juan, un despliegue emocional donde coros e instrumentación se entrelazan con solistas vocales y recitativos.
Cada nota cuenta una historia; ninguna está ahí por casualidad. Si el texto habla del dolor, la música evoca tristeza; si habla de alegría o celebración, entonces cambia completamente el tono. Por ejemplo, cuando Pedro llora amargamente tras cantar el gallo, parece que podemos escuchar su llanto resonar en cada nota. Y cuando Jesús es azotado, los instrumentos imitan los latigazos con tal realismo que te estremece.
Bach es único e insuperable. Esta tarde a las 19h en el Teatre d’Inca y mañana a las 19:30h en la iglesia de La Mercè en Palma, tendremos la oportunidad única de disfrutar esta monumental obra bajo la dirección de Bernat Quetglas junto con la Orquesta y Coro de Cámara de Mallorca y varios solistas vocales. Una cita imprescindible para aquellos que amamos la música.