Joan Miquel Oliver, el alma de Antònia Font, se encuentra en un momento de reflexión y creación. Su nuevo trabajo, titulado ‘Música Tecnològica’, es un viaje sonoro que desafía las convenciones. Con trece temas que surgen del azar, Oliver no busca nada en particular; ni siquiera espera que su música sea escuchada.
Un Proceso Creativo Sin Reglas
En una conversación íntima, Joan comparte su perspectiva sobre la tecnología: «La máquina te permite ejecutar muy rápido lo que imaginas». Pero esto va más allá de la rapidez; es una invitación a explorar nuevos caminos. A lo largo de su carrera, ha buscado romper con lo anterior. «Todos los discos han sido una ruptura respecto al anterior», dice con una sonrisa.
Con este nuevo proyecto, se adentra en un mundo de melodías arrítmicas y atonales donde no hay un tema reconocible. ¿Qué busca? «Una música basada en la aleatoriedad», afirma, dejando claro que se siente cómodo explorando lo desconocido.
Sin miedo al qué dirán, ha decidido regalar este disco al público y a su discográfica. No hay formato físico ni gastos; es una obra nacida del deseo puro de crear sin restricciones. “No pido nada”, confiesa con sinceridad. Y cuando le preguntan sobre cómo surgieron las piezas musicales, relata con entusiasmo su sistema aleatorio: tirando dados para escoger notas y ritmos.
Este proceso le otorga un carácter único a ‘Música Tecnològica’. Con humor revela que incluso tuvo dudas iniciales sobre si llevarlo a cabo o no: «Tiré una moneda y salió que no… ¡pero me salté eso!» En sus palabras hay un eco de libertad creativa.
Al final del día, este disco puede parecer raro para algunos, pero Joan cree firmemente en el poder de escuchar cosas nuevas: «Cualquiera puede hacer música; solo necesita intencionalidad». Así nos invita a abrir nuestros oídos a nuevas posibilidades mientras se prepara para el último concierto con Antònia Font en el Mallorca Live.