La historia del tenis español sigue escribiéndose a lo grande. Esta vez, los protagonistas son Juan Carlos Ferrero y Samuel López, quienes han sido reconocidos como los entrenadores del año. Su labor ha llevado a Carlos Alcaraz, el joven fenómeno murciano, a alzarse con dos títulos de ‘Grand Slam’ y terminar el año como número uno del mundo. ¡Impresionante!
Un trabajo en equipo que brilla
Este galardón, que se entrega desde 2016 y es elegido por sus propios colegas, es un claro reflejo del esfuerzo conjunto de Ferrero y Samu. Estos dos entrenadores han estado trabajando codo a codo en la Ferrero Tennis Academy, situada en Villena, donde su conexión ha ido creciendo con cada partido. No es casualidad que hayan coincidido en cuatro torneos importantes: el Barcelona Open Banc Sabadell, Roland Garros, Wimbledon y las ATP Finals de Turín. En todos ellos, nuestro Carlitos alcanzó al menos la final.
A lo largo de la pasada pretemporada, ambos introdujeron cambios significativos en el estilo de juego de Alcaraz. Desde añadir unos gramos extra al cuello de su raqueta hasta ajustar su mecánica de saque para hacerlo más fluido. Y vaya si funcionó; los resultados están ahí para demostrarlo.
No podemos olvidar que Juan Carlos ya había recibido este reconocimiento anteriormente en 2022, convirtiéndose así en el primer entrenador que repite esta distinción tan prestigiosa. Mientras tanto, Samuel López nos recuerda que siempre hay espacio para seguir soñando: «Hay que seguir buscando más cosas grandes y que están al alcance de tan pocos».
Para redondear la buena racha, hace poco Alcaraz también fue premiado con el galardón Stefan Edberg por ser el jugador más deportivo del circuito actual; un premio muy merecido ya que es la segunda vez que lo obtiene. A este ritmo, parece que el futuro del tenis español tiene mucho más por ofrecer.

