El mundo del tenis está de enhorabuena. Roger Federer, seis veces campeón del Open de Australia, vuelve a pisar el cemento de Melbourne después de un largo parón desde 2020. Y lo hace por todo lo alto, acompañado nada menos que por Andre Agassi. ¿Quién no se emociona solo con pensarlo?
La cita será el próximo 18 de enero y se espera con gran expectación. La ceremonia inaugural ha prometido ser un espectáculo que los aficionados no querrán perderse. Federer, que alcanzó las semifinales en su última participación antes de la pandemia, ha comentado con nostalgia: «Parece que pasó una vida desde que acuñé la frase ‘Happy Slam’ para describir este torneo, y todavía me sonrío al recordar todos esos momentos increíbles».
Un encuentro que ya es historia
Acompañados por los australianos Lleyton Hewitt y Patrick Rafter, esta exhibición promete ser un evento memorable. Además, el Open de Australia parece tener planes en mente para futuras ediciones, y hasta se habla de la posible presencia de Rafael Nadal, quien estará pronto en Jeddah como embajador de la Federación Saudí.
No cabe duda que esta reunión entre titanes del tenis es algo que muchos llevamos esperando años. La conexión entre Federer y Tennis Australia va más allá; son socios en la Laver Cup, creando así un vínculo indiscutible.
No podemos negar que la agenda de Roger está llena: justo antes voló a Stuttgart para anunciar una colaboración entre Mercedes-Benz y el circuito femenino. Sin duda, el legado de estos grandes sigue vivo y fuerte.

