El Mutua Madrid Open está que arde y, a pesar de que los individuales se han quedado sin representantes españoles, el espíritu del tenis nacional sigue en pie. Marcel Granollers y su compañero argentino Horacio Zeballos han dado un golpe sobre la mesa al vencer a los alemanes Krawietz y Puetz con un ajustado 7-6 y 7-5, asegurando así su lugar en la gran final.
Un partido para recordar
No fue tarea fácil. Desde el inicio, el encuentro estuvo cargado de tensión, como si cada punto pesara toneladas. Ya en cuartos de final habían demostrado su valía al derrotar a los segundos favoritos, Heliovaara y Patten, pero ahora se enfrentaban a un dúo que había acumulado tres títulos este año. Sin embargo, la compenetración entre Granollers y Zeballos brilló con luz propia. Marcel mostró una precisión milimétrica en la red mientras Horacio mantenía la calma ante las adversidades.
A pesar de tener un 5-3 a favor en el segundo set, la pareja hispano-argentina tuvo que enfrentar un ‘break’ inesperado que les puso contra las cuerdas. Pero no se dejaron llevar por la ansiedad; lograron recuperarse rápidamente para alcanzar el tie-break con el apoyo incondicional de más de mil aficionados animando desde las gradas de la pista Arantxa Sánchez Vicario.
Ahora solo queda esperar quién será su rival en esa ansiada final: si los imponentes Arevalo y Pavic, número uno del mundo, o los estadounidenses Christian Harrison y Evan King. Lo cierto es que Granollers y Zeballos están listos para luchar por otro título, lo que sería el undécimo como pareja y el vigésimo noveno para Marcel.