En una emocionante final del Grand Prix Villa de Madrid, Mayar Sherif, la tenista egipcia y primera favorita del torneo, se alzó con el título al derrotar a la mexicana Renata Zarazúa, segunda cabeza de serie. El partido, que duró 141 minutos, terminó con un marcador de 6-3 y 6-4, en un encuentro marcado por el frío y el viento que no impidieron que ambas jugadoras dieran lo mejor de sí en la pista.
Una final histórica
Este enfrentamiento era inédito en la historia del Club de Campo Villa de Madrid; nunca antes las dos primeras cabezas de serie se habían visto las caras en una final. Desde el comienzo, Mayar mostró su agresividad habitual y rápidamente tomó ventaja con un 3-1. Sin embargo, Renata no se rindió fácilmente y logró igualar a 3-3. A pesar del gran nivel demostrado por ambas, los errores cometidos por Zarazúa terminaron costándole la primera manga.
La segunda parte del encuentro siguió una dinámica similar: Sherif comenzó dominando pero fue igualada nuevamente por su rival. Sin embargo, cuando todo parecía equilibrado, Mayar volvió a despegarse para llevarse el partido. Durante esta última fase, Renata recibió atención médica debido a unas molestias en la mano y problemas en la rodilla que le habían estado afectando últimamente. Esto claramente mermó su capacidad para seguir el ritmo del juego.
Con esta victoria, Sherif suma su décimo título individual ITF y cierra una semana exitosa que le ha otorgado 100 puntos WTA, acercándola al ‘top 50’. Tras su triunfo declaró: «este torneo me da la confianza necesaria para jugar el WTA 1000 de Madrid». Por su parte, Renata reconoció lo complicada que es jugar contra ella: «A veces te tira para atrás con sus dejadas… Me ha costado adaptarme hoy pero estoy súper contenta con la semana».
La ceremonia de entrega de trofeos contó con la presencia de figuras destacadas como Juan Carlos Vera y Jesús Barrera del Club de Campo Villa de Madrid. También hubo reconocimiento para los árbitros y supervisores que hicieron posible este evento tan especial.