El corazón del Mallorca está de luto tras la salida de Dani Rodríguez, una situación que ha dejado a todos los implicados con un sabor amargo. Jagoba Arrasate, el técnico del equipo, no ha podido ocultar su dolor y ha compartido abiertamente lo difícil que ha sido para él afrontar esta decisión. «Ha sido lo más complicado que me ha pasado como entrenador», confesó, reflejando el impacto emocional que esta marcha tiene para él y para el club.
Un adiós lleno de emociones
Dani Rodríguez se va dejando una huella imborrable tras siete años y medio en la isla. El jugador gallego, al rescindir su contrato este jueves, toma una decisión valiente: renuncia a gran parte de su salario con el fin de volver a sentirse futbolista después del castigo impuesto por Arrasate debido a sus declaraciones públicas. Un hecho sin duda doloroso tanto para él como para sus compañeros.
«Con esta situación hemos perdido todos», asegura Arrasate, recordando que no hay ganadores en este juego. Aunque Dani había entrenado con ganas y dedicación, su deseo de jugar nuevamente era más fuerte. «Le deseo lo mejor», añade el entrenador, reconociendo la historia que han construido juntos durante estos años.
En un emotivo mensaje de despedida, Dani mostró su orgullo por todo lo logrado con el Mallorca: dos ascensos y 282 partidos oficiales son solo algunos hitos en su carrera. Su carta fue un agradecimiento sincero hacia compañeros y empleados del club: «Gracias a todos los que están detrás, esos héroes anónimos sin los cuales esto no funcionaría». Su respeto hacia ellos es palpable; reconoce cada esfuerzo realizado en conjunto durante tantos años.
A pesar de las circunstancias difíciles, Dani se marcha con la conciencia tranquila: «He dado siempre todo por este escudo», dice mientras acepta haber pagado un precio alto por sus decisiones. Sin rencores ni resentimientos, mira hacia adelante dispuesto a seguir luchando por sus sueños en otros campos.