El pasado sábado fue un día de celebración para Martin Valjent, quien se convirtió en el futbolista extranjero con más partidos disputados con la camiseta del RCD Mallorca. Tras una victoria contundente contra el Elche (3-1), este central eslovaco no pudo ocultar su emoción al declarar que «el Mallorca lo es todo para mí«. Con 259 encuentros a sus espaldas, Valjent ha tejido una historia íntima y entrañable con esta tierra que lo ha acogido como uno más.
Un hogar lejos de casa
Agradecido por cada instante vivido aquí, Martin comparte que su familia ha crecido en la isla, donde nació su hija y donde se siente profundamente identificado. «Nos sentimos como en casa», dice mientras reflexiona sobre su trayectoria. No es fácil permanecer tanto tiempo en un solo lugar, pero él busca siempre nuevos retos y motivaciones personales. Al finalizar el partido, expresó: «He celebrado con una victoria; es una semana redonda». Y no es para menos, después de haber planificado bien el encuentro, este triunfo era crucial para mantener la confianza del equipo.
Valjent nunca imaginó alcanzar esta cifra de partidos: «Cuando llegué estaba muy feliz de seguir aquí y ahora estoy haciendo historia; es un privilegio absoluto». Sin embargo, enfatiza que lo que más le llena es contribuir al éxito del equipo y continuar sumando esfuerzos.
En cuanto a su compañero Omar Mascarell, no escatima elogios: «Es un chico fantástico y espero que se quede muchos años aquí», porque todos sabemos lo valioso que puede ser para el grupo. La admiración entre compañeros resalta aún más cuando menciona a Antonio Raíllo, quien regresó tras una operación reciente. «Su compromiso e importancia son indiscutibles», concluye Valjent con esa pasión que lo caracteriza.