Cuando las noticias sobre el Real Mallorca comienzan a rodar, los corazones de los aficionados latean al unísono. Y en esta ocasión, el eco de la sanción impuesta a Dani Rodríguez resuena con fuerza. Muchos mallorquinistas han alzado la voz y no tienen reparos en calificar como ‘justas’ las medidas del club hacia el capitán, quien ha sido suspendido durante diez días y despojado de su brazalete por un comportamiento que ha dejado mucho que desear.
“Esto no se puede permitir”, “me parece una barbaridad”, son solo algunas de las reacciones que reflejan la indignación entre los hinchas bermellones. Después del encuentro contra el Real Madrid, Dani lanzó unos comunicados incendiarios señalando a Jagoba Arrasate y también al joven Jan Virgili, algo que encendió una tormenta dentro y fuera del vestuario. Izan Bautista Bonet, abonado número 13.624, lo tiene claro: “Un capitán no debería salir a criticar en público; eso no es propio de un líder”.
Aficionados divididos pero firmes en sus posturas
Toni Vallespir Perelló, presidente de Unió de Penyes y socio 3.714, respalda sin dudarlo la decisión del club: “Criticar al entrenador en redes sociales es inaceptable. Los problemas se arreglan dentro del vestuario”. Por su parte, Gonzalo Mazarrasa, vicepresidente de la Peña Meseta RCDM, sentencia: “La figura del capitán debe ser ejemplar. Dani hizo lo contrario al señalar a un compañero por frustraciones personales”. Sin embargo, hay quienes muestran empatía hacia el jugador como Álvaro Cobarro, quien aún está procesando lo sucedido: “Dani ha dado mucho al club; me entristece ver cómo termina así su carrera aquí”.
Pep Lladó, conocido como ‘Es Berro’, también lamenta esta situación tan amarga para todos los involucrados: “No hay explicación lógica para este comportamiento. Lo único que queremos es ver al equipo mejorar tras una temporada complicada”. Algunos incluso sugieren que si Jagoba decide mantenerlo fuera del equipo podría ser mejor rescindirle el contrato directamente.
Aunque hay voces críticas con la severidad de la sanción —Manuel Oliver dice que fue una chiquillada— otros están convencidos de que Maffeo puede encontrar redención tras pedir perdón por sus actos recientes. La afición parece dispuesta a darle otra oportunidad siempre y cuando demuestre esfuerzo y compromiso en el campo.
Así nos encontramos en este momento crucial donde las decisiones tomadas por jugadores y cuerpo técnico influirán enormemente en nuestro querido Mallorca.