En un caluroso día de verano en Austria, Pablo Ortells, el director deportivo del RCD Mallorca, se sentó a charlar con Roman Vojtek, el representante del portero Dominik Greif. Esta reunión no era cualquier cosa; estaba marcada por la tensión y la expectativa de una posible salida del guardameta al Olympique de Lyon. La situación es delicada, ya que cada minuto cuenta en esta semana crucial.
La negociación se intensifica
La jornada comenzó con rumores sobre el interés del OL en Greif. Este martes, nuestros compañeros de Diario de Mallorca sorprendieron a Vojtek en el hotel donde se concentra el equipo bermellón. Con un puro en mano, su presencia no pasaba desapercibida y encendía las especulaciones. Ayer mismo, lo volvimos a ver durante el amistoso entre Mallorca y Lyon, intercambiando palabras con Ortells mientras ambos observaban atentamente lo que sucedía en el campo.
El club francés tiene prisa por encontrar un nuevo portero después de la marcha de Lucas Perri y están convencidos de que Greif podría ser la solución ideal para sus problemas bajo los palos. Sin embargo, Ortells no tiene intención de facilitar las cosas; él ha demostrado ser firme en negociaciones anteriores y no piensa dejar escapar al eslovaco sin obtener lo que considera justo.
A pesar de que Dominik sigue sin jugar en estos amistosos —suma tres partidos fuera del campo—, la presión está aumentando. En menos de 24 horas, el Mallorca tendrá otro compromiso ante el Parma y será interesante ver si finalmente se toma alguna decisión respecto al futuro del portero.
Con cada movimiento que hacen tanto Ortells como Vojtek, los aficionados están al borde de sus asientos. ¿Se irá Greif a Lyon? Las respuestas podrían estar más cerca de lo que pensamos.