Robert Navarro, el extremo catalán del Mallorca, está cada vez más cerca de volver a brillar en el terreno de juego. Desde que sufrió una lesión en el abductor de la pierna derecha el 8 de marzo, ha tenido que mantenerse alejado de lo que más ama: jugar al fútbol. Pero ahora, con las ganas acumuladas y la recta final de la Liga a la vista, su regreso parece inminente.
Un proceso de recuperación cargado de esperanza
El jugador ha compartido con los medios del club cómo ha ido llevando esta etapa complicada. “Al principio fue un tratamiento manual intenso. He estado trabajando con mi fisio, Jose, en Pamplona, donde me ha ayudado mucho en esta fase inicial. Todo era bastante tranquilo, enfocándonos en liberar tensión y tratar la zona afectada”, comenta Robert con sinceridad.
Uno de los momentos clave para su recuperación se está llevando a cabo en el recién inaugurado Mallorca Sports Clínic. “En las primeras sesiones calentamos con rodillos y trabajamos movilidad; luego pasamos a ejercicios para fortalecer y activar los músculos antes de hacer técnica de carrera”, explica entusiasmado, mientras siente cómo poco a poco va recuperando sensaciones en el campo.
A pesar del momento difícil que atraviesa —su contrato acaba en junio y aún no tiene claro dónde jugará la próxima temporada—, él sigue optimista. “La verdad es que estoy bien. Al principio te sientes mal por lesionarte, pero enseguida aceptas y te pones a trabajar desde el primer minuto”, asegura Robert con una sonrisa en su voz. “Estoy contento porque cada día hago más cosas y me siento más cerca del equipo”. Sin duda, su energía contagiosa es un rayo de esperanza para todos los aficionados del Mallorca.