El fútbol siempre tiene sus altibajos, y el Mallorca no es la excepción. En la sala de prensa de Son Bibiloni, Jagoba Arrasate, el entrenador del equipo bermellón, se mostró optimista ante el próximo desafío. Después de ese duro golpe que supuso la derrota contra el Celta, Arrasate cree firmemente que todavía hay esperanza en su lucha por alcanzar Europa.
Un partido crucial
«Para engancharnos de nuevo necesitamos una victoria», dijo con determinación. Y no es para menos, este sábado se enfrentan a la Real Sociedad, un rival directo que les lleva un punto de ventaja. «Cada encuentro cuenta, y este lo consideramos vital», continuó el técnico, dejando claro que el equipo ha dejado atrás las malas vibraciones iniciales de la semana.
A medida que avanza la semana, Arrasate nota un cambio en su plantilla: «Hemos preparado todo como siempre, tácticamente y analizando al rival. Hay momentos en los que los jugadores necesitan apoyo y cariño; al inicio estábamos un poco bajo mínimos, pero ahora están muy motivados para mañana».
A pesar de las bajas notables como Muriqi o Morlanes, Arrasate está convencido de que todos deben estar listos para dar lo mejor cuando se presenta la oportunidad: «Cuando hay ausencias hay que tirar del banquillo; ahora otros jugadores tienen su chance y espero que lo hagan bien». Además, comentó sobre Larin, quien ha sido objeto de críticas por parte de la afición: «Es un jugador con altibajos emocionales; necesita recuperar esa confianza en sí mismo porque su mejor versión nos será muy útil».
Así está el Mallorca ante una final anticipada; todos miran hacia adelante con ansias de cambiar el rumbo y volver a ilusionar a una afición que merece sonreír.