La emoción y el desafío se apoderan del Illes Balears Palma Futsal en este inicio de temporada. Tras una primera semana de competición intensa, donde han tenido que lidiar con tres partidos en tan solo siete días, el equipo se enfrenta a un parón internacional que llega con sorpresas y retos. Este calendario, que parece más un rompecabezas, nos presenta hasta seis pausas en los próximos ocho o nueve meses. Y claro, eso significa gestionar las ausencias de jugadores clave y el cansancio acumulado para aquellos que sí viajan.
Los convocados que dejan huella
En esta primera pausa, tres futbolistas han sido llamados a representar a sus selecciones nacionales. Fabinho y Lucão volarán hacia Brasil para participar en la segunda edición de la Copa de Naciones, un torneo que tendrá lugar en Brasilia del 14 al 21 de septiembre. El equipo brasileño, liderado por Marquinhos Xavier y vigente campeón del mundo, buscará revalidar su título ante rivales como Polonia y Francia. Su debut será contra Polonia el 17 de septiembre dentro del Grupo A.
No menos importante es la participación de Mario Rivillos, quien se une a la selección española para preparar el próximo Europeo programado para enero y febrero de 2025 en tierras bálticas. Los dos amistosos ante Armenia, uno en Pamplona y otro en Tudela, servirán para afinar detalles antes del gran evento.
A pesar de que la salida de estos tres internacionales representa un nuevo reto para el Palma Futsal —que ve cómo sus planes se ven alterados— también refleja el notable trabajo realizado por el club balear, consolidándose como cantera para selecciones top a nivel mundial.
Mientras tanto, los jugadores que quedan en casa aprovecharán este parón para recargar energías y prepararse con calma ante lo que viene. La recta final de 2025 promete ser emocionante para el equipo dirigido por Antonio Vadillo, quien trabaja duro para llegar al tramo decisivo en óptimas condiciones.