En la soleada localidad italiana de Ostia, un joven talento balear ha brillado con luz propia. Hablamos de Joshua Castro, un windsurfista del Club Marítimo San Antonio de la Playa (CMSAP), quien ha conseguido alzarse con la medalla de bronce en la categoría Sub-15 del Campeonato de Europa de la clase Techno293. Con 64 competidores representando a una decena de países, el desafío no era nada fácil.
La competición no comenzó como se esperaba; los dos primeros días las condiciones del mar eran adversas y el viento, caprichoso. Pero eso no detuvo a Joshua. El último día fue crucial: después de comenzar en cuarta posición, logró remontar y superar al griego Foivos Koulalis, alcanzando así el tercer peldaño del podio.
Un camino lleno de obstáculos y sueños
A lo largo del campeonato, los vientos fueron cambiantes. Sin embargo, el domingo trajo consigo condiciones más favorables para Joshua. En su primera prueba del día, mostró su destreza y se llevó el primer puesto, sumando también dos terceros lugares que le aseguraron esa ansiada medalla de bronce.
Para este joven prometedor, esta es su primera temporada compitiendo en la categoría Sub-15. A pesar de enfrentarse a rivales con más experiencia -algunos incluso un año mayores-, ya había dejado huella siendo campeón del mundo y de Europa Sub-13 la temporada pasada.
No solo Joshua destacó en Ostia; su compañero Biel Martorell también dejó claro que hay futuro en el CMSAP al terminar en octava posición. Al regresar a Mallorca tras la aventura italiana, ambos jóvenes fueron recibidos entre aplausos por sus familiares y amigos en el aeropuerto de Palma.
Joshua comentó sobre su experiencia: «Ha sido un campeonato muy difícil; competir contra rivales más pesados me ponía las cosas complicadas». Y Biel añadió que las condiciones habían sido “bastante raras” durante esos días cortos pero intensos.