El ConectaBalear ha dicho adiós a su sueño de conquistar la Superliga, después de un emocionante partido contra el Guaguas que terminó 3-2. La lucha en la cancha fue feroz, con ambos equipos defendiendo su territorio como si no hubiera un mañana. Fueron momentos clave los que marcaron la diferencia, sobre todo en un tie-break que dejó a todos al borde del asiento.
Una batalla de titanes
Desde el principio, el encuentro estuvo lleno de igualdad y emoción. Vanco fue un auténtico espectáculo en el servicio y sus potentes ataques sorprendieron a la defensa grancanaria. El equipo liderado por Camarero encontró ritmo y el dúo Rousseaux-Bezerra comenzó a marcar la pauta. Manacor, sin embargo, no se quedó atrás y luchó con todo ante un Guaguas que mostraba dientes afilados.
En el segundo set, Manacor salió decidido a demostrar su valía y presionó al rival hasta ponerlo contra las cuerdas. A pesar de las buenas defensas del conjunto amarillo, Guaguas supo reaccionar y equilibrar las cosas gracias a su astuto bloqueo. Pero al final, los visitantes lograron hacerse con el set 25-27.
A medida que avanzaba el tercer set, los saques directos comenzaron a marcar la pauta del juego. Bruno y Bezerra se pusieron manos a la obra, haciendo temblar la defensa manacorina e impulsando a su equipo hacia una clara victoria 25-16 en ese parcial. Pero no todo estaba dicho; en el cuarto set, Guaguas mostró su garra frente a un Manacor más ordenado pero igualmente decidido.
Las emociones continuaron hasta forzar un tie-break emocionante donde Almansa volvió a brillar con un saque directo que dejó huella. Manacor luchó hasta el final, pisándole los talones al equipo grancanario que supo mantenerse firme en defensa para llevarse finalmente el encuentro por 15-12. Así termina una etapa para ConectaBalear: una despedida amarga pero llena de coraje e intensidad.