Lewis Hamilton, el icónico piloto británico, no está atravesando su mejor momento. En una reciente charla con Sky, no tuvo reparos en expresar que lo que comenzó como un sueño junto a Ferrari se ha convertido en una auténtica pesadilla. Con la frustración a flor de piel, el siete veces campeón se siente atrapado en un torbellino de resultados desalentadores.
Caminos tortuosos en la Scuderia
A pesar de haber logrado un triunfo en el sprint de China, desde entonces las cosas han ido cuesta abajo para Hamilton. Actualmente, se encuentra en la sexta posición del campeonato, sin podios que celebrar y acumulando solo 148 puntos, muy por detrás de su compañero Charles Leclerc, quien tiene 214 y ya ha subido al podio siete veces. La situación es crítica, especialmente tras el abandono en Interlagos y los desastrosos resultados recientes.
A través de sus redes sociales, Hamilton prometió no rendirse: «Ni ahora, ni después, ni nunca. Vuelvo a mí. Vuelvo a mi equipo«, pero eso no apaga la llama de su preocupación. En Brasil vivió una jornada complicada; no había velocidad y recibió golpes por todos lados durante la carrera. «Quería sumar buenos puntos», reflexionó lamentándose por lo que pudo ser y no fue.
Las críticas también están a la orden del día. Su estilo de pilotaje que tan bien le funcionaba con Mercedes parece estar bajo escrutinio comparándolo con el trabajo técnico excepcional de Carlos Sainz. En Ferrari hay mucha presión; aquí no solo basta con estar presente; hay que dar un extra para salir adelante.
A medida que avanza la temporada, las palabras de Hamilton resuenan: «Está esa cara entre el sueño de conducir con un equipo increíble y la otra pesadilla por los resultados.» Sin duda alguna, este es uno de los momentos más difíciles para él dentro del mundo del automovilismo y los aficionados están expectantes ante cómo manejará esta situación tan compleja.

