Max Verstappen, el actual campeón del mundo, ha dejado caer una bomba en el mundo de la Fórmula 1. En medio de lo que él mismo ha descrito como sus peores ‘vacaciones’ desde 2018, se plantea la dura realidad de que Red Bull necesita una reestructuración. A pesar de ser el único capaz de mantener al equipo en las primeras posiciones esta temporada, su última actuación en el GP de Hungría ha sido un claro reflejo de las carencias del monoplaza.
Un Gran Premio desalentador
Aquella jornada, Verstappen no pudo evitar quedar atrapado entre los problemas del ‘RB21’. Registró un octavo tiempo durante la clasificación y terminó cruzando la línea en novena posición. Un resultado que lo deja a 97 puntos del líder Oscar Piastri, marcando su peor desempeño desde aquel año donde se encontraba a 108 puntos detrás de Hamilton.
Hablando con ‘F1.com’, Max comentó sobre esta caída en rendimiento: «El equipo pasó por momentos difíciles antes de mi llegada. Ahora es necesario entender qué está pasando para revertir esta situación tan desfavorable». Con esas palabras, dejó entrever que un cambio es fundamental para volver a estar en la lucha por el campeonato.
A pesar de que aún consideran a Red Bull como un equipo fuerte, Verstappen subraya que deben hacer una pequeña reconstrucción si quieren recuperar su competitividad. «Esto lleva tiempo», asegura el neerlandés, pero espera que no sea demasiado largo.
Además, el piloto no se ha hecho eco de los rumores sobre su posible salida hacia Mercedes. «Siempre hay mucho ruido alrededor. Yo prefiero concentrarme en lo que viene y asegurarme de que estamos listos para ser competitivos desde el primer momento», concluyó con firmeza.