El Gran Premio de Austria ha vuelto a dejarnos sin aliento. En el Red Bull Ring, Marc Márquez se ha llevado la delantera en la Práctica de MotoGP, aunque no sin antes enfrentarse a una dura competencia de Bagnaia, su hermano Álex y un brillante Pedro Acosta. Con temperaturas que alcanzaban los 29 grados y un asfalto caliente como el infierno, la tensión se palpaba en el aire.
Días como estos hacen historia
Desde el primer momento, la emoción estuvo a flor de piel. Jorge Martín, en su primera vuelta lanzada, cayó en la curva 9. Afortunadamente, pudo levantarse solo. La pista no perdona y las condiciones estaban complicadas con esos neumáticos fríos. Mientras tanto, los pilotos probaban compuestos duros y medios para afinar sus estrategias para las carreras Sprint y larga.
Las KTM mostraron su nuevo carenado buscando agilidad; ¡y vaya si lo lograron! Por otro lado, Bagnaia lideró durante un rato pero tuvo un susto que casi le cuesta caro al salirse por una escapatoria. Pero no todo fue fácil para él: Maverick Viñales, tras solo seis vueltas, tuvo que parar por problemas en su hombro izquierdo; una decisión difícil pero necesaria según su doctor.
A medida que avanzaba la práctica, Pedro Acosta comenzó a brillar con su goma blanda trasera. El espectáculo siguió con caídas e incidentes como el de Fabio Quartararo o Miguel Oliveira que nos recordaron lo arriesgado de este deporte. A falta de 27 minutos para terminar la sesión, ¡sorpresa! La bandera roja hizo acto de presencia interrumpiendo la acción debido a daños en el circuito.
Cuando volvieron a rodar, algunos pilotos optaron por gomas blandas buscando marcar tiempos competitivos. Al final del día, Márquez logró mantener su posición privilegiada justo antes del pit stop final. Y aunque Raúl Fernández coló una Aprilia entre los diez primeros, Yamaha no tuvo suerte: todos sus pilotos quedaron fuera de la Q2.
Así queda configurada una emocionante lucha por la pole entre figuras como Márquez, Acosta y Bagnaia mientras nosotros seguimos expectantes ante lo que vendrá mañana. Sin duda alguna, días como estos son los que marcan el pulso del motociclismo.