La Fórmula 1 nos ha dejado una historia interesante últimamente, y en el centro de todo está Max Verstappen. El piloto, que alguna vez fue imbatible, ahora se encuentra lidiando con una serie de carreras que lo han dejado sin podio durante cuatro eventos consecutivos. La última vez que cruzó la línea de meta entre los tres primeros fue en Imola, allá por mayo. Desde entonces, ha tenido actuaciones que no reflejan su verdadero talento: noveno en Budapest, cuarto en Bélgica, quinto en Gran Bretaña y un abandono doloroso en Austria.
El reto del RB21
No podemos pasar por alto el hecho de que el RB21 parece estar perdiendo el rumbo en cada circuito. Si bien es cierto que se defiende mejor en las pistas rápidas y rectas, aún así no logra levantar cabeza. Con la llegada de Laurent Mekies como nuevo jefe del equipo, muchos esperábamos un cambio positivo; sin embargo, parece que estamos viendo un retroceso carrera tras carrera.
A pesar del desánimo palpable en Verstappen tras sus últimas actuaciones –declaró directamente “no ganaré más este año”– Mekies intenta mantener la calma y asegura que esto es solo algo temporal. Él confía en que después del parón veraniego volverán a ser competitivos en Zandvoort y Monza. «Fue un fin de semana complicado para nosotros», comentó Mekies sobre la situación actual del coche. Y aunque reconoce que McLaren ha tomado ventaja, también recuerda cómo Max sorprendió a todos con una victoria Sprint en Spa.
Es comprensible sentir frustración cuando uno tiene un coche que no responde como debería. Pero aquí estamos ante una temporada aún larga, y aunque el desarrollo del vehículo se haya ralentizado considerablemente, siempre hay lecciones por aprender incluso cuando las cosas se ponen difíciles.
Parece ser que dentro del equipo Red Bull hay optimismo cauteloso. Helmut Marko también respalda esta idea: “No creo que esto vuelva a suceder”, afirma con firmeza mientras observa los problemas técnicos enfrentados por Verstappen este fin de semana pasado. Se reconoce la necesidad urgente de mejorar el rendimiento a baja y media velocidad para evitar futuros tropiezos.
Así va la narrativa actual de Verstappen y su equipo: entre retos e incertidumbres, pero con una chispa de esperanza a medida que avanza la temporada.