En el Gran Premio de Hungría, Charles Leclerc se presentó como un verdadero gladiador del asfalto, partiendo desde la pole y convirtiéndose en el favorito indiscutible para llevarse la victoria. Después de un sábado que quedó grabado en la memoria de los aficionados, el monegasco no pudo contener su alegría. “La pole más sorprendente de mi vida”, confesó con una sonrisa que reflejaba tanto el esfuerzo como la presión que ha soportado últimamente.
Leclerc y su lucha contra los gigantes
No ha sido sencillo para Leclerc hacerse un hueco en Ferrari. A pesar de haber brillado al final de 2024, su camino se vio empañado por la llegada del gigante Lewis Hamilton, quien llegó a Maranello con declaraciones contundentes sobre el coche: “Solo quiero un coche ganador para el próximo año”. Mientras tanto, nuestro protagonista luchaba por demostrar su valía. Y es que aquel día en Hungría fue más que una carrera; fue un grito de guerra ante quienes le cuestionaban. “Soy inútil”, había dicho antes, pero esas palabras quedaron atrás cuando cruzó la línea marcando la diferencia.
Aunque McLaren sigue siendo una amenaza real con su ritmo imbatible, Leclerc ha demostrado ser capaz de dar sorpresas. Con cinco podios bajo su cinturón este año y a solo 30 puntos detrás de Hamilton, cada vuelta cuenta. La presión está ahí y los fans esperan esa primera victoria desde México 2024 como agua de mayo.
Parece que este Gran Premio podría ser el escenario perfecto para hacer historia. Sin embargo, no hay que olvidar a Fernando Alonso acechando desde la quinta posición; siempre listo para aprovechar cualquier oportunidad y alterar los planes ajenos. Además, las condiciones meteorológicas podrían jugar un papel crucial, sumando emoción al ya electrizante espectáculo del automovilismo.