En el último Gran Premio de Austria, el ambiente en Aston Martin era palpable. Mike Krack, ingeniero jefe del equipo, dejó claro que estaban «a toda máquina en la fábrica». Y es que, con la llegada del próximo fin de semana, se avecinan novedades que podrían cambiar las reglas del juego. La ilusión de Fernando Alonso por lo que está por venir es contagiosa.
Un séptimo puesto que sabe a victoria
A pesar de no ser el circuito más favorable, Alonso logró puntuar nuevamente, mostrando una vez más su talento indiscutible. Al finalizar la carrera, Krack comentó entre risas sobre cómo sus simulaciones no daban como resultado ese séptimo puesto antes de comenzar: «¿Séptimo? Obviamente no lo esperábamos», dijo con sinceridad. Sin embargo, el equipo había trazado una estrategia diferente; sabían que si seguían el camino habitual, lo más probable es que no terminaran entre los puntos.
La clave del éxito estuvo en la ejecución perfecta del piloto asturiano y su capacidad para gestionar los neumáticos a lo largo de la carrera. “Tuvimos algo de suerte al mantenernos cerca de Lawson”, reconoció Krack. Pero eso no quita mérito a una actuación bien planificada y ejecutada.
Aston Martin parece haber encontrado su rumbo y está decidido a dejar huella en cada carrera. No se trata solo de tener el coche más rápido; se trata de sacar el máximo provecho en cada situación. Krack fue claro: «Incluso si tu coche no es el mejor, siempre hay que luchar por cada punto».
Al preguntarle sobre la posibilidad casi impensable hace unas carreras atrás -realizar una estrategia a una parada cuando otros optaban por dos-, Krack soltó otra carcajada: «Pensábamos lo mismo por la mañana». Un testimonio sincero sobre las dudas iniciales y cómo han logrado superarlas.
Con vistas al futuro cercano, se prevén nuevas mejoras para el AMR25; ya están trabajando para introducir actualizaciones significativas pronto. “Todo va como un reloj en cuanto a producción”, afirmó Krack sin querer arriesgarse demasiado al hablar sobre qué exactamente estará listo para probar este viernes.
A medida que se acercan al gran premio en casa dentro de unos días, Aston Martin aspira a seguir sorprendiendo y evolucionando. El equipo tiene grandes esperanzas puestas en las próximas carreras y confía plenamente en su capacidad para afinar aún más su monoplaza hacia 2026.