En el GP de Austria, Mari Boya ha demostrado que su reciente fichaje por la Academia Aston Martin le sienta como un guante. Con una remontada impresionante, escaló del 14º al cuarto puesto, acercándose peligrosamente a Rafael Camara, el líder del Mundial. Sin duda, este fin de semana en Spielberg ha sido un escaparate de su talento y determinación.
Una carrera llena de emoción
A solo 0,3 segundos de subirse al podio, Boya dejó claro que no se rinde fácilmente. Enfrentándose a dos vueltas intensas, consiguió superar a Camara, quien cayó del segundo al sexto tras no gestionar bien sus neumáticos Pirelli. El español no solo selló un cuarto puesto significativo; acechaba también al alemán Tim Tramnitz durante toda la carrera. Esta es ya la segunda gran remontada de Boya en este circuito; el sábado había ganado ocho posiciones en la carrera corta.
Lamentablemente, el piloto ilerdense tuvo problemas en la calificación que pudieron haberle colocado en el podio los dos días. Por otro lado, Nikola Tsolov brilló con luz propia; dominó desde la pole hasta llevarse la victoria con aplomo y recibió las efusivas felicitaciones de Alonso en el parque cerrado. El asturiano se mostró orgulloso de su pupilo.
La victoria de Tsolov y el desplome final de Camara han dejado el campeonato F3 más emocionante que nunca y todos tenemos ganas ya de ver qué sucederá en Silvertstone el próximo fin de semana.