La Fórmula 1 se vistió de gala en el corazón de Nueva York, justo después de un electrizante Gran Premio de Canadá. La ciudad que nunca duerme fue el escenario perfecto para la premiere de F1 The Movie, una película esperada con ansias por los fanáticos. Aunque muchos de los pilotos más icónicos estaban allí, había dos ausencias notables: Fernando Alonso y Max Verstappen. Y es que estos dos grandes suelen preferir estar al volante antes que ante las cámaras.
Una noche llena de estrellas
Acompañando a los protagonistas del film, Brad Pitt y Damson Idris, la alfombra roja se llenó de glamour en Times Square, un lugar emblemático donde la emoción estaba a flor de piel. Carlos Sainz, siempre sincero, pidió a los aficionados que tuvieran la mente abierta respecto a lo que Hollywood trae al mundo del motor: «Le pido a la gente más fan de la Fórmula 1 que tenga la mente abierta con Hollywood». Un mensaje claro y directo.
Sainz no solo fue parte del evento como espectador; su aparición en el film es un momento muy esperado, luciendo los colores de Ferrari, aunque el propio piloto también mostró preocupación por cómo será recibido su papel. Por otro lado, Tsunoda bromeó sobre su escasa protagonismo: «En la mayor parte de escenas aparezco siendo adelantado», reflejando esa chispa que siempre le acompaña.
A pesar de las ausencias, varios jefes de equipo y parejas también dieron un toque especial a la noche. La película promete ser una producción monumental y pretende llevar aún más lejos el alcance ya globalizado del deporte. Sin embargo, no todos están convencidos sobre algunas decisiones recientes dentro del campeonato; especialmente tras ver cómo algunas iniciativas no lograron despegar como se esperaba.
Nueva York simboliza un aterrizaje espectacular para una Fórmula 1 que está viviendo un año lleno de cambios e innovaciones. Pero mientras unos celebran esta evolución, otros miran con recelo hacia el futuro. Al fin y al cabo, cada carrera es una historia nueva en este emocionante capítulo llamado automovilismo.