En el vibrante ambiente de las 500 Millas de Indianápolis, un nombre destaca entre todos: Álex Palou. Con una actuación que ha dejado a más de uno boquiabierto, el piloto español ha demostrado que va a por todas en esta edición. El mensaje es claro: no solo está compitiendo, está luchando por su segunda pole en esta icónica carrera.
Un sábado brillante para Palou
El día comenzó con Roger Penske reconociendo lo evidente: “Nos está machacando”. Y es que la temporada que está haciendo Palou es sencillamente soberbia. Este sábado, el catalán marcó el ritmo y se posicionó al frente de la tabla tras su primer intento en la sesión de clasificación. Un momento crucial, ya que cualquier error podría haberlo dejado fuera del juego como le ocurrió el año pasado.
A pesar de salir desde atrás, en un 25º lugar que parecía desventajoso, las nubes y el viento jugaron a su favor. Con una serie de vueltas vertiginosas promediando más de 233 millas por hora, dejó atrás a otros competidores como Scott McLaughlin y Josef Newgarden, quienes también intentaron seguir su estela pero no lograron superar sus tiempos.
Con una sonrisa que lo decía todo al bajar del coche, Palou expresó: “Ojalá la tanda sirva para pasar al Fast 12, ese es nuestro objetivo”. Tenía toda la razón del mundo; evitar riesgos innecesarios era clave. Y así fue como decidió no volver a salir al asfalto, dejando todo listo para mañana.
Mientras tanto, otros grandes nombres también aseguraron su lugar entre los doce mejores. Pero entre los 34 pilotos presentes, cuatro tendrán que luchar por sobrevivir en un escenario donde cada milésima cuenta y donde algunos deberán enfrentarse al fatídico destino que ya han sufrido figuras legendarias del automovilismo.
Así pues, mañana será un día lleno de emociones con pruebas finales antes del Fast 12, donde se coronará al poleman de esta emocionante 109ª edición. Las expectativas son altas y nosotros estaremos ahí para contarlo todo.