La Fórmula E está revolucionando el mundo del automovilismo y, ¿qué mejor manera de demostrarlo que en las curvas del icónico circuito de Mónaco? Imagina un monoplaza capaz de «fabricar» su propia energía mientras corre. Esto no es ciencia ficción, ¡es pura realidad!
Durante una emocionante prueba, se descubrió que un monoplaza de Fórmula E logró acumular la energía necesaria para completar una vuelta entera al trazado monegasco. James Rossiter, antiguo piloto de este campeonato eléctrico y ex jefe del equipo Maserati, fue el valiente encargado de llevar a cabo este desafío.
El reto en las montañas
En colaboración con Google Cloud y GENBETA, los organizadores decidieron lanzar uno de estos monoplazas montaña abajo en el Col de Braus, en los Alpes. La idea era ver cuánta energía podía recuperar durante su descenso. ¿El resultado? Sorprendente: logró almacenar entre 1,6 y 2,0 kWh suficientes para recorrer los 3.337 metros del Gran Premio de Mónaco.
Aquí viene lo interesante: durante una carrera típica, estos coches son capaces de recuperar hasta 600 kW gracias a la frenada regenerativa. Esto significa que alrededor del 40% de la energía que consumen proviene directamente de sus propios esfuerzos mientras están en movimiento. ¡Increíble!
No solo se trata de velocidad; aquí hay inteligencia y sostenibilidad trabajando mano a mano. Así que si pensabas que adelantar en Mónaco era imposible, piénsalo dos veces.